Hay varias formas de mejorar el aislamiento térmico de una vivienda, no obstante, el sistema de aislamiento térmico exterior (SATE) ha demostrado su efectividad frente a otras opciones.
La incorporación de paneles aislantes en la fachada de una edificación favorecen las condiciones de habitabilidad. Además, la principal ventaja es que su colocación no afecta a su interior ni tampoco al diseño arquitectónico.
El aislamiento de una vivienda
Sin duda alguna, el aislamiento térmico de una vivienda ayuda a reducir el gasto energético y favorece al medioambiente. Este proceso consiste en disminuir la transferencia de calor y frío, en función de las temperaturas del exterior. Por lo tanto, se busca el mecanismo más adecuado para conseguirlo.
Gracias a la aplicación de técnicas y al uso de ciertos elementos constructivos, se puede mejorar considerablemente la climatización. La idea es crear un envolvente con materiales que sean resistentes a las temperaturas extremas. Asimismo, se intentarán eliminar las posibles humedades en los techos, paredes y suelos, a la vez que reducir las emisiones de dióxido de carbono para conservar el medioambiente.
Una de las principales dudas es si es más conveniente el aislamiento externo o interno. En el último caso, se trata de la aplicación en la parte interior de la vivienda para mejorar la protección. Sin embargo, no tiene la capacidad de eliminar los puentes térmicos. Este tipo de trabajo se suele realizar si no es posible llegar a acuerdo con los vecinos o el diseño es bastante complejo.
Por otro lado, también surgen interrogantes sobre cuál es el mejor aislante térmico. Por dicho motivo, si conocemos los materiales existentes y sus propiedades, será más fácil elegir el más adecuado, según las necesidades de cada edificación. En el SATE se utilizan mucho los paneles de poliestireno expandido (EPS), el poliestireno extruido (XPS) o lana mineral.
Aislamiento para el frío y el calor: cómo elegirlo
El Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE) emplea la norma internacional UNE EN ISO 7730:2006 para medir el índice de confort y bienestar térmico. En invierno, lo más conveniente son las temperaturas aproximadas de 21 °C y, en verano los 26 °C.
Tal como hemos indicado, los mejores aislantes térmicos son aquellos que reúnen una serie de características para garantizar el mejor confort en un edificio. Sin embargo, vamos a enumerar las propiedades de los más populares en el sistema SATE para conocer por qué razón son los más apropiados.
Paneles de poliestireno expandido
Este material se emplea para el recubrimiento de un inmueble y se pega con un mortero adhesivo a la fachada. Posteriormente, hay que recubrirlo con una malla y utilizar acrílicos para embellecerlo.
Una de las mayores ventajas es que el acabado es muy estético y su composición es ligera y muy manejable. Hay una amplia gama de modelos para garantizar los diferentes niveles de aislante térmico.
Paneles de poliestireno extruido
Esta opción también es muy ventajosa y ofrece un gran número de beneficios en las construcciones. El poliestireno extruido es muy ligero y consiste en una plancha de espuma rígida que sirve para mejorar la eficiencia energética.
El procedimiento de instalación es parecido al resto, lo único es que se suele emplear en las zonas inferiores de la fachada, porque tiene menor resistencia para absorber la humedad.
Paneles de lana mineral
Las placas de lana mineral se caracterizan por ser aislantes termoacústicos con roca mineral, resina o material reciclado.
Una de sus principales características es que son muy resistentes al fuego y tienen la capacidad de repeler el agua. Por lo tanto, si se trata de combatir las humedades, es una buena elección. Además, se convierte en el aliado perfecto para reducir los ruidos del exterior.
Placas de yeso laminado
Por último, el yeso es un material sostenible, incombustible y muy resistente al moho y humedad. Como resultado, es ideal para evitar las condensaciones. Estas placas son muy manejables y sirven para acabar con los puentes térmicos. Además, son muy resistentes al fuego y su instalación es muy rápida.
En conclusión, estas son algunas ideas para mejorar las condiciones térmicas de una vivienda o edificio. Esperamos que con estos consejos sepas cuál es el mejor aislante para el frío y el calor.
En caso de dudas, solicita más información, porque está demostrado que el sistema SATE es una de las alternativas más eficaces para garantizar el confort y el aislamiento. En SATE Mediterráneo somos expertos en este sector y ofrecemos la mejor solución para cada cliente.